2.12.09

Estoy siendo individuo?


Hasta qué punto somos individuos, ésa es la pregunta de hoy.

Hasta qué instante aprovechamos la riqueza de ser lo que somos, y lo expresamos apropiadamente en base a lo que el entorno espera de nosotros?

El pináculo de la individualidad, se centra de forma exclusiva en ser lo suficientemente hábil como para abrazar al mundo con nuestro tiempo y energía.

El no recluirnos en el tabernáculo de nuestro ego, e intentar así buscar una más que fugaz satisfacción por el hecho de creernos individuos para nosotros mismos sin sentir que nadie pueda “invadir” nuestra vida, sólo terminará por quitarnos la capacidad de darle un buen uso a este mismo libre albedrío, individualidad, como gustemos catalogarla.

El ser un individuo completo y pleno, implica el entender el potencial en su máxima dimensión, que tenemos en el momento actual, y para ello debemos saber informarnos de la fuente autorizada sobre este punto crucial: qué hacer con nuestra vida, tiempo y energía, cómo invertir esta sagrada libertad en el receptáculo que tenga la mayor capacidad de reciprocar nuestros intentos de ser nosotros.

Si con una actitud de respeto y consideración nos acercamos a estos tópicos tan excelsos, e intentamos obtener esta información-cual-gema, indagando con la respectiva actitud de sumisión (tesoro casi por siempre olvidado en el mundo de los mortales), no podremos sino llegar a la fina conclusión de que el concepto del dar y el darnos, constituye la cima del ser, la cúspide de la situación humana vista desde todos sus ángulos.

Y desde ya, en nuestro mejor intento por volver este cúmulo de palabras una explícita y real realidad, en la medida que logremos amoldarnos en lo cotidiano a este ideal sin paralelos, en esa misma medida nos encontraremos sintiendo que nuestra existencia toda tiene algún sentido.

Y no sólo algún sentido, sino cada vez más y más, encajando cada instante en una sinfonía de perfecta lógica e irracionalismo simultáneos, acomodando toda contradicción en un principio absoluto de total capacidad de armonizarlo todo.


Welcome to life, forever.

1 comentario:

emanuel.l dijo...

mucho fluir en poco texto, pego bellamente.
sin palabras